Friday, October 21, 2016

Carta 1: Roto

Hace un montón no escribía. Confieso que me da algo de miedo leer eso que amontoné antes por aquí. Mejor no lo leo. Escribo hoy, porque si evito la relectura, la escritura es de las conversaciones que más me gustan.

Hoy noté que algo siempre me hizo falta. Desde chica. Algo me acompañó mientras crecía y es una ausencia que creció conmigo, de la mano. Como un roto de fábrica. Pero nadie lo sabe.

¿De qué se reirán tanto esos que desde la otra calle revientan eufóricos en la noche mientras escribo? ¿cómo estarán vestidos? ¿Qué habrá pasado en sus vidas? Pareciera que no les falta nada. Ríen fuerte, con ganas, sin culpa dejan su alma en cada carcajada.

Ya no los escucho. Y ese silencio me hace escribir otra vez. Me pone tristeZ A mi, lo confieso, me atraviesa un roto sin fondo. ¿De qué me voy a agarrar el día cuando el amor con el que crecí ya no me pueda abrazar? ¿El día cuando hable y nadie responda? ¡Me da tanto miedo! Me asomo y veo ese roto sin fondo que me atrae, me seduce, me espanta, me encanta, me mata.

¿Cómo agarrarse del vacío? ¿Se puede? Nunca aprendí a coser, ¿se puede remendar un corazón tan roto? 

Ayuda.