Wednesday, February 14, 2007

Miradas cruzadas

Ayer me olvidé de ti.

Cerré los ojos. No soporté el ruido de la lluvia y olor a Diesel de la calle. Entre sueños, te pensé. Te pénsé toda la tarde,la mañana y las horas de descanso, pero aún así, me olvidé de ti.

Con el peso del cuerpo, fui alejandome de éste mundo, con la esperanza de encontrarte en otro universo, galaxia o habitación de hotel. Cerré los ojos y mi rostro dibujó una sonrisa dulce por la esperanza ingenua de vernos en la luna y tomarnos un café. Y con la espera, el vaho sexy de tu boca mojó la ventana desde donde yo te miraba. Estuve tan ocupada viéndote, que me olvidé de tí. Perdóname.

Hoy, la tarde fue la misma. El bus acorralaba los murmullos de una mujer cincuentona y de pelo oscuro que tarareaba nuestra canción. Pero, que interrumpía con una risa juguetona al sentirse en evidencia ante los oídos nada agradecidos del resto de la gente. Patético.

Al caer de nuevo en la calle, la lluvia mordió primero mi cuello y luego, mi frente. Y entre gotas caníbales, me acordé de morirme de miedo. Me acordé de tí. Me acordé de que depronto estabas muerto.